multimedia.normal.a516ded8cd030319.YmVybGluX25vcm1hbC53ZWJw

El precio del café aumento más del 300% en un año.

Otra caída, bares y restaurantes venden hasta un 40% menos de café. El café es una fuente de ingresos significativa para los locales gastronómicos, casi como el plato fuerte cuando llega el momento de cerrar la caja del día. Por eso, en enero pasado, cuando se disparó su precio sonaron las primeras alarmas.

En medio de la disparada inflacionaria y complicaciones para la importación, el costo de los granos creció seis veces durante el año pasado, lo que llevó el precio del pocillo a un promedio de 1.500 pesos.

Pero ya desde antes el consumo de café en bares empezó a achicarse. «Es una de las primeras cosas que la gente recorta», asegura el mozo de un bar del centro de la ciudad y afirma que «el típico cliente que venía todos los días a tomar un café, ya no existe más».

Tu opinión es importante para todos